SI TUVIERA…SERÍA FELIZ

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Cuentan que una vez un hombre caminaba por la playa en una noche de luna llena mientras pensaba:

– “Si tuviera un auto nuevo, sería feliz”
– ” Si tuviera una casa grande, sería feliz”
– ” Si tuviera un excelente trabajo, sería feliz”
– ” Si tuviera pareja perfecta, sería feliz”

En ese momento, tropezó con una bolsita llena de piedras y empezó a tirarlas una por una al mar cada vez que decía: “Sería feliz si tuviera…”

Así lo hizo hasta que solamente quedaba una piedrita en la bolsa, la cual guardó. Al llegar a su casa se dio cuenta de que aquella piedrita era un diamante muy valioso. ¿Te imaginas cuantos diamantes arrojó al mar sin detenerse y apreciarlos?

¿Cuántos de nosotros pasamos arrojando nuestros preciosos tesoros por estar esperando lo que creemos perfecto o soñado y deseando lo que no se tiene, sin darle valor a lo que tenemos cerca nuestro?

Mira a tu alrededor y si te detienes a observar te darás cuenta de lo afortunado que eres, muy cerca de ti está tu felicidad, y no le has dado la oportunidad de demostrarlo.
Cada uno de nuestros días es un diamante precioso, valioso e irremplazable.
Depende de ti aprovecharlo o lanzarlo al mar del olvido para nunca más poder recuperarlo.

Nuestra Vida

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Un viejo carpintero estaba listo para retirarse. Le comunicó a su

empleador acerca de sus planes de dejar el trabajo en la industria

de construcción de casas y vivir una vida mas placentera con su

esposa y su familia. El extrañaría el salario que recibía pero quería

retirarse.

El empleador estaba triste de ver que un buen empleado se retiraba

y le pidió, como favor personal, que construyera una última casa. El

carpintero dijo que sí pero con el tiempo se vió que su corazón y

su esfuerzo no estaban en el trabajo. No hizo bien su labor y

seleccionó materiales de baja calidad. Fué la peor casa que había

construido en la vida.

Fué una manera infortunada de terminar su carrera. Cuando el

carpintero terminó el trabajo y el empleador vino a inspeccionar, le abrió la puerta al carpintero, lo invitó a seguir y le

dijo «Esta es tu casa, mi regalo para tí».

Que lástima! Qué arrepentimiento! «Si hubiera sabido que esta iba a

ser mi casa la construyo de manera diferente» dijo el carpintero.

Ahora tenía que vivir en la casa que el mismo había construido y

era un desastre.

Lo mismo sucede con nosotros. Construimos nuestra vida de una

manera displicente. De una manera reactiva en lugar de positiva.

Esperamos el lugar de actuar. Ponemos mucho menos de lo que tenemos en nuestros esfuerzos y vivimos en una permanente queja tratando de culpar a los demás de nuestra situación..

En cosas importantes, con la familia, amigos, el trabajo, etc., no

damos lo mejor que tenemos. Entonces, con sorpresa, nos encontramos viviendo en la casa que nosotros mismos hemos construido. «Si hubiera sabido habría actuado diferente» pensamos.

Piense en Ud. mismo como el carpintero. Piense acerca de su casa.

Cada día, cuando tenga que clavar un clavo, colocar una división o

levantar una pared, hágalo sabiamente, hágalo con amor y dé lo mejor que tiene. Es la única vida que llegará a construir. Aún si vive solo por un día más, ese día merece vivirse de una manera digna y gratificante.

La placa sobre la pared dice «LA VIDA ES UN PROYECTO DE

AUTOCONSTRUCCION». Su vida hoy es el resultado de sus actitudes y decisiones del pasado. Su vida mañana será el resultado de sus actitudes y decisiones de hoy.

Fabula de la Profesora

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Una profesora en clase saca de su cartera un billete de 20 euros y lo enseña a sus alumnos a la vez que pregunta: «¿A quién le gustaría tener este billete?». Todos los alumnos levantan la mano.

Entonces la profesora coge el billete y lo arruga, haciéndolo una bola. Incluso lo rasga un poquito en una esquina. «¿Quién sigue queriéndolo?». Todos los alumnos volvieron a levantar la mano.

Finalmente, la profesora tira el billete al suelo y lo pisa repetidamente, diciendo: «¿Aún queréis este billete?». Todos los alumnos respondieron que sí.

Entonces la profesora les dijo:
«Espero que de aquí aprendáis una lección importante hoy. Aunque he arrugado el billete, lo he pisado y tirado al suelo… todos habéis querido tener el billete porque su valor no había cambiado, seguían siendo 20 euros.
Muchas veces en la vida te ofenden, hay personas que te rechazan y los acontecimientos te sacuden, dejándote hecho una bola o tirado en el suelo. Sientes que no vales nada, pero recuerda, tu valor no cambiará NUNCA para la gente que realmente te quiere. Incluso en los días en los que sientas que estás en tu peor momento, tu valor sigue siendo el mismo, por muy arrugado que estés».

Cuento Corto Con Moraleja

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El Viejo Perro Cazador

Cuento Corto con Moraleja

Cuentos Corto con Moraleja
El Viejo Cazador

Hace muchos años, vivía un viejo perro de caza, cuya avanzada edad le había hecho perder gran parte de las facultades que lo adornaban en su juventud. Un día, mientras se encontraba en una jornada de caza junto a su amo, se topó con un hermoso jabalí, al que quiso atrapar para su dueño. Poniendo en ello todo su empeño, consiguió morderle una oreja, pero como su boca ya no era la de siempre, el animal consiguió escaparse.
Al escuchar el escándalo, su amo corrió hacia el lugar, encontrando únicamente al viejo perro. Enfadado porque hubiera dejado escapar a la pieza, comenzó a regañarle muy duramente.
El pobre perro, que no se merecía semejante regañina, le dijo:
-Querido amo mío, no creas que he dejado escapar a ese hermoso animal por gusto. He intentado retenerlo, al igual que hacía cuando era joven, pero por mucho que lo deseemos ambos, mis facultades no volverán a ser las mismas. Así que, en lugar de enfadarte conmigo porque me he hecho viejo, alégrate por todos esos años en los que te ayudaba sin descanso.

La Moraleja de esta Fabula: respeta siempre a las personas mayores, que aunque ya no puedan realizar grandes proezas, dieron sus mejores años para darte a ti y a tu familia, una vida mejor.

El viejo perro cazador fabula

El Viejo Perro Cazador Fabula

El Viejo Perro Cazador Fabula

Quien Movio Mi Queso Video Moraleja

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Quien Movio Mi Queso Video Moraleja

Quien Movio Mi Queso

Quien Movio Mi Queso

Esta es una historia sobre cambio donde el queso es lo que queremos dia a dia.
Historia de superacion, exito y actitud.

FABULA LA CIGARRA Y LA HORMIGA

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Video de la Fabula de La Cigarra y La Hormiga

FabulaCigarra y Hormiga

FabulaCigarra y Hormiga

La hormiga trabaja a brazo partido todo el verano bajo un calor aplastante.
– Construye su casa y se aprovisiona de víveres para el invierno.
– La cigarra piensa que la hormiga es tonta y se pasa el verano riendo, bailando y jugando.
– Cuando llega el invierno, la hormiga se refugia en su casita donde tiene todo lo que le hace falta hasta la primavera.
– La cigarra, tiritando, sin comida y sin cobijo, muere de frío –

Los Tren Chanchitos Video Con Moraleja

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Hoy les traemos un video muy popular : Los Tren Chanchitos y el Lobo Feroz

Es una excelente historia con una gran moraleja sobre el trabajo y las responsabilidades.

Les propongo que nos cuenten que moraleja les da la historia. y se diviertan mucho.

Saludos!

jose y el ladrillo

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José iba en su nuevo automóvil, un gran Jaguar a mucha velocidad.

¿La razón? Llegaría tarde al trabajo si no corría.

Su automóvil Jaguar rojo brillante, era una de sus mas preciadas posesiones, cuando
súbitamente… ¡Un ladrillo se estrelló en la puerta de atrás!

José frenó el auto y dio reversa hasta el lugar de donde el ladrillo había
salido.

Se bajó del automóvil y vio a un niño sentado en el piso. Lo agarró, lo sacudió y le gritó muy enojado: ¿Qué demonios andas haciendo? ¡Te va a costar muy caro lo que le hiciste a mi auto! ¿Por qué me tiraste el
ladrillo?

El niño llorando, le contestó: ‘Lo siento, señor, pero no sabía
qué hacer, mi hermano se cayó de su silla de ruedas y está lastimado, y no lo
puedo levantar yo solo. Nadie quería detenerse a ayudarme!’

José sintió un nudo en la garganta, fue a levantar al joven, lo sentó en su silla de ruedas,
y lo revisó. Vio que sus raspaduras eran menores, y que no estaba en peligro.

Mientras el pequeño de 7 años empujaba a su hermano en la silla
de ruedas hacia su casa, José caminó lentamente a su Jaguar,
pensando…

Moraleja: 

JOSÉ NUNCA LLEVÓ A REPARAR EL AUTO, DEJÓ LA PUERTA COMO ESTABA, PARA HACERLE RECORDAR QUE NO DEBÍA IR A TRAVÉS DE LA VIDA TAN RÁPIDO COMO PARA QUE ALGUIEN  VENGA QUE TIRARLE UN LADRILLO PARA LLAMAR SU ATENCIÓN..

 

Sabias Moralejas..